Juan José Matta, Profesor Asistente del Departamento de Economía en la FAE se adjudicó un Fondecyt de Iniciación en Investigación 2024 para su proyecto “Centralized School Choice and School Effectiveness.”

COMPARTIR

31 / 01 / 2024

El académico nos comentó “Una de las claves para avanzar hacia un sistema educativo eficaz es entender mejor los factores que contribuyen a la efectividad de las escuelas. Pero para entender qué hace que una escuela sea efectiva, primero es necesario contar con métricas confiables de eficacia escolar, entendida como el efecto causal de una escuela sobre los resultados de sus estudiantes.

Para determinar si una escuela es efectiva muchas veces se recurre a medidas como el promedio de puntajes SIMCE o tasas de retención y promoción escolar. Sin embargo, estas medidas suelen ser engañosas, ya que pueden ser más un reflejo de las características de los estudiantes que asisten a la escuela que de la calidad de la institución en sí, algo a lo que en economía llamamos un “problema de selección”. Así por ejemplo, si por el motivo que fuere un establecimiento atrajera exclusivamente a estudiantes con un alto capital cultural, es probable que éste obtenga un alto promedio en el SIMCE aún cuando no aporte nada a sus estudiantes. Por el contrario, una escuela que realiza una buena labor educativa podría obtener bajos puntajes en el SIMCE si sus estudiantes provienen exclusivamente de contextos desaventajados. Si bien es posible atenuar el problema de selección recurriendo a métricas que ajusten por características observables como el nivel educacional de los padres, la validez de dichas métricas sigue descansando en supuestos fuertes que pueden no cumplirse en la práctica.

El uso de métricas expuestas al problema de selección no solo limita nuestra capacidad de aprender sobre la naturaleza de la efectividad escolar, sino que además puede establecer incentivos perversos para directores y sostenedores, quienes podrían terminar siendo evaluados por su capacidad de seleccionar buenos estudiantes más que por su desempeño en la labor educativa.

Para superar el problema de selección y obtener medidas confiables de efectividad escolar es necesario contar con alguna fuente de variación experimental o cuasiexperimental en la asignación de estudiantes a las escuelas. Es en este punto donde los sistemas centralizados de admisión escolar son de gran utilidad. Dichos sistemas se basan en algoritmos que priorizan a los postulantes según factores como la proximidad a las escuelas y las preferencias, pero asignan aleatoriamente los cupos entre postulantes con el mismo estatus de prioridad cuando los cupos son insuficientes para satisfacer a la demanda. Esta aleatoriedad proporciona “experimentos naturales” que permiten obtener estimaciones consistentes del efecto causal de las escuelas en los resultados de los estudiantes.

En mi proyecto de investigación seguiré este enfoque, tomando ventaja del componente aleatorio del Sistema de Admisión Escolar (SAE) recientemente adoptado en Chile para obtener medidas confiables de efectividad escolar. El SAE centraliza la admisión escolar a nivel nacional, asignando cada año a cerca de 400.000 estudiantes en todos los niveles a más de 8.000 escuelas primarias y 3.500 escuelas secundarias, lo que lo convierte en el mayor sistema centralizado de admisión escolar con desempate aleatorio en el mundo. La escala de este sistema, así como la diversidad de escuelas y estudiantes que participan en él, ofrecen una oportunidad única para estudiar preguntas relevantes sobre eficacia escolar, sus causas y sus consecuencias.”